23/2/16

cultura (IV)

La Ducati TT2.



En 1981 Ducati desveló esta bella máquina, basada en la existosa Pantah. Usaba un chasis Verlicchi y un basculante cantilever de acero, unido a una horquilla Marzocchi de 35 mm y ruedas de magnesio de 18 pulgadas de diámetro.
Esta moto de competición tenía 600 cc y era capaz de desarrollar 76 cv a 10.500 rpm, con un peso de 140 kg.

Más datos: el chasis era muy ligero, sólo 7 kg, y fue la primera Ducati en montar un multitubular tipo Treillis. Las llantas ultraligeras eran fabricadas por Campagnolo, y la delantera de los últimos modelos en 1984 era de 16 pulgadas.

Típica imagen, enseñando sus intimidades
Esta máquina usaba un sistema de frenos Brembo de dos discos de 280 mm delante.
Era muy ligera para los estándares de entonces, y tan compacta y delgada que era una pesadilla para que se pudieran acoplar los pilotos más altos. Con un peculiar y bello carenado tumbado hacia atrás, y el tanque de gasolina encastrado entre los tubos superiores del chasis, su estética marcó un hito. O al menos así lo entiendo yo.

Este modelo fue tan exitoso en pista, que Ducati decidió hacer algunas versiones para equipos privados, quienes hacían cola para acceder a esta criatura diseñada por Fabio Taglioni.

Entre otros muchos hitos en competición, el más sonado fue el atribuido a Tony Rutter, quien ganó tres Campeonatos del Mundo con ella:

Rutter en 1982

1/2/16

Intenciones

Lo intento, en serio.
Surgen distracciones de vez en cuando, que me alejan del objetivo inicial de este blog, y como por ondulaciones temporales cuyo significado ignoro, vuelvo y retomo el tema.
Pero cuesta trabajo, verdadero curro que me deja a menudo una sensación de tremenda pérdida de tiempo porque cada vez es más y más difícil encontrar algo digno, algo verdaderamente interesante de colgar aquí.

Parece que los creadores, los preparadores, los tuneros, cuyo origen es fabricar algo, incluso esculpir si se quiere ver así, algo distinto, algo nuevo, innovador, impactante, único, parece como digo que se ponen de acuerdo para acometer sus proyectos.
Uno vez una Monster caferacerizada, y las ha visto todas. Uno busca una SS con tintes retro, o neoclásicos, o más o menos radicales... y tres cuartos de lo mismo. Es que me da la impresión de que lo que hizo la propia Ducati es difícil de superar (salvo honrosas excepciones), y nadie es capaz de hacer algo con un mínimo de clase o pretensiones que se acerque siquiera a la gama Sportclassic. Ni hablamos ya de cosas como la MHe o la Supermono.
¿Tan cojonudamente perfectas, tan difícil de superar es la materia prima original?

Ahora está de moda el bodrio ese que han dado en llamar "Scrambler". Me ahorraré los calificativos. Y surgen cienes y cienes de preparaciones con esa base. Vale, por lo menos que sirva para algo, eso está bien, teniendo en cuenta el amplísimo margen de mejora que tiene ese modelo de serie. Pero la verdad es que su configuración de chasis, las medidas generales, no dan para mucho. Aún así, algo se ha visto, pero no me acaba de quedar redondo. Y la mayoría, pongamos el 97%, es directamente una puta mierda.

Sigo buscando, no dessesperen.